Hasta el 28 de noviembre permanecerá la muestra “Obra inédita 2010 - 2015” de Juan Astica en Central Newbery.
Se puede visitar de martes a sábados de 15 a 20 hs. con entrada libre y gratuita en Av. Jorge Newbery 3599, Buenos Aires.
"¡qué bien se respira frente a los cuadros de Astica!. Podemos recibir el aire puro de su singularidad como de sus asociaciones, de sus influencias, de sus escuelas, y a la vez nada, apenas la certeza de que este es el color, este es el conflicto; aquí la vibración, la plenitud física de la cuantiosa paleta, las pinceladas como epidermis y cicatrices. Nos tranquiliza, nos aplaca ese verano sempiterno que es la pintura de Astica, que encandila con la insolación de su potencia cromática mientras nos alivia con la sombra fresca de un equilibrio recatadamente exacto..."
"En él, pintura es el deber y el abandono, el saber y la ignorancia, una pura ganancia y una pura pérdida. Una persistencia atemporal, inmaterial dentro de la más incómoda materialidad. Una cosa torrencial y lógica, un perfecto catálogo aluvional que deja en la orilla unos restos coyunturales, pedazos de circunstancia, que convenimos en llamar cuadros..." Eduardo Stupía.
Se puede visitar de martes a sábados de 15 a 20 hs. con entrada libre y gratuita en Av. Jorge Newbery 3599, Buenos Aires.
"¡qué bien se respira frente a los cuadros de Astica!. Podemos recibir el aire puro de su singularidad como de sus asociaciones, de sus influencias, de sus escuelas, y a la vez nada, apenas la certeza de que este es el color, este es el conflicto; aquí la vibración, la plenitud física de la cuantiosa paleta, las pinceladas como epidermis y cicatrices. Nos tranquiliza, nos aplaca ese verano sempiterno que es la pintura de Astica, que encandila con la insolación de su potencia cromática mientras nos alivia con la sombra fresca de un equilibrio recatadamente exacto..."
"En él, pintura es el deber y el abandono, el saber y la ignorancia, una pura ganancia y una pura pérdida. Una persistencia atemporal, inmaterial dentro de la más incómoda materialidad. Una cosa torrencial y lógica, un perfecto catálogo aluvional que deja en la orilla unos restos coyunturales, pedazos de circunstancia, que convenimos en llamar cuadros..." Eduardo Stupía.