10 de abril de 2012

Galería de Arte María Elena Kravetz y Merit Gran Hotel Victoria presentan la exposición de pinturas de Fernando Cometto y esculturas de Olga Argañaraz

Galería de Arte María Elena Kravetz y Merit Gran Hotel Victoria anuncian la segunda muestra de su calendario de exposiciones  del año 2012.
Se trata de pinturas de Fernando Cometto, artista cordobés que vive y trabaja en Francia, y esculturas de Olga Argañaraz, reconocida artista local de afianzada carrera nacional e internacional.
La exposición sería inaugurada el próximo viernes 13 de abril a las 19,30 hs. en la planta baja de Merit Gran Hotel Victoria, peatonal 25 de Mayo 240 de la ciudad de Córdoba, Argentina.
La muestra de entrada libre y gratuita puede ser visitada diariamente en el lobby y galería interior del hotel.
Olga Argañaraz
"Artista de alma. Escultora sin condicionamientos  y con una originalidad creadora imprevisible.
Presenta sus esculturas con un vigor sin límites, algunas son simbólicas y otras muestran un toque naturalista.
Demuestra en ellas sus propias vivencias. Sin ser palabra escrita, tienen el sabor de lo pensado y lo establecido.
Elige los materiales apropiados a cada narrativa del objeto.
Realiza trabajos pacientes horadando el acero con la chapa batida al vuelo, combinada en algunos casos con la piedra  reconstituída, ejecutando de este modo el juego rítmico que impone el material a las formas.
Todo lo realiza temperamental y significativamente desde su alma, en un mundo donde prima todo lo efímero.
La energía que transmite nos hace mover las fuerzas interiores, la sensibilidad del espíritu y el deseo de crear un mundo nuevo".
Fernando Cometto
"Resido en Europa desde 1998; soy licenciado en Psicología y he cursado la facultad de Bellas Artes.
Mi pintura es el mediador entre la realidad interior que vivo y la realidad particular del entorno social , natural y cultural que habito.
Me interesa la diversidad, y el color es una manera muy rica de expresar y disfrutar de lo diferente. La aparición de tantos personajes en mi obra, es la posibilidad de mostrar mis diferentes Yo, las fuerzas y los miedos, la quietud y el movimiento interno permanente.
Es importante para mí ironizar la realidad para no caer en el desencantamiento frente a las situaciones cotidianas, cada uno debería ser capaz de reírse de si mismo.
La repetición en la búsqueda pictórica me interesa como fenómeno humano y natural; una repetición que se parece pero que jamás es idéntica; repetición como acción de búsqueda, repetición caótica y serena al mismo tiempo, donde el espacio contiene esa quietud como posibilidad de interacción entre el hombre y su espacio.
Nada mas extraño que lo reconocible. El espacio de afuera al volverse propio se incorpora con una intensidad que nos atraviesa y descoloca. Alli puede devenir una suerte de sentirse extranjero en su propio cuerpo y lugar, devenir,  extraterrestre de si mismo, una necesidad de reciclar el interior para reorganizar el mundo propio y el paisaje externo.
Un marciano que camina por Av. Colón, y una persona corriente recorre el universo en un platillo volador, hay alguna diferencia?  Al final el Sol siempre es el mismo".