Continuando con su calendario 2015, la galería de arte Daniel Rueda presenta una nueva muestra de arte contemporáneo. En esta oportunidad se trata de cuatro prestigiosos artistas vinculados a las obras de arte en madera: Miguel Gandolfo, Fernando Rosas, Julio Melto y Albert Sassani.
La reconocida artista, gestiora y crítica de arte licenciada Laura Valdivieso nos comparte sobre los artistas expositores lo siguiente:
La reconocida artista, gestiora y crítica de arte licenciada Laura Valdivieso nos comparte sobre los artistas expositores lo siguiente:
“Miguel Gandolfo trabaja la madera de manera excluyente, es decir, que toda su producción artística está ligada a ese material. Combina dos aspectos que, analizados temporalmente, entrecruzan su pasado y su presente: es heredero de una tradición familiar ligada a la carpintería de más de cien años y, al mismo tiempo, es un artista con los ojos puestos en las versiones más contemporáneas de la escultura de herencia MADI. Utiliza la geometría pura y genera con ella lógicas constructivas completamente irracionales, azarosas. No deja rastro de sus manos ni de las herramientas, todo es borrado cuidadosamente. Mediante la técnica del ensamble y con una terminación preciosista, una serie de líneas corpóreas se enredan en el espacio y le dan forma a estos nudos, cuyo mensaje es silencioso (o hermético). La obra de Gandolfo se enreda sólo con el presente.
Fernando Rosas elige la madera esporádicamente, entrecruzada con su condición de pintor y con la herencia que le dejó su padre en el manejo del metal batido y soldado. Para producir sus esculturas, recurre a la talla, la más antigua de las técnicas artísticas. Hay entonces en ellas una fuerte huella de la escultura tradicional, a lo que se le suma el tratamiento realista mimético de la forma. Pero ese realismo, resuelto además con un preciosismo extremo, está tan acentuado que deviene en una especie de hiperrealismo, operación que las desplaza hacia la contemporaneidad. Una fuerte carga onírica envuelve a estos seres a los que no les afecta la gravedad o tienen inesperadas relaciones con los pájaros. La obra de Rosas se entrelaza cómodamente con la poesía.
Julio Melto elige también la madera, pero en ocasiones decide hacerla convivir con otros materiales. Como Fernando, trabaja a partir de la talla, pero deja a la vista las huellas de las herramientas, lo que le da a la obra una combinación de caracteres brutalistas, expresionistas y primitivos. Crea imágenes que mixturan animales, personas y objetos, simplificados, entrecruzados y emparentados de manera surreal. Se apilan o se fusionan. Conviven juntos en un bloque material que obliga al espectador a relacionarlos, pero la interpretación es imprecisa, envolvente, como en un cuento fantástico. La obra de Melto trae al presente las huellas del arte primitivo desde la perspectiva que le aportaron los artistas modernos.
Albert Sassani toma los restos de los usos que otros hacen de la madera y construye sus imágenes a partir del ensamble. Manipula formas encontradas, preconstruidas y las compone para definir una especie de edificios lúdicos a los que les suma la pintura. Su geometría deja traslucir la herencia del constructivismo del Río de la Plata y con ella algunas huellas ancestrales del pasado precolonial. Descarta el preciosismo para dar paso libre a la rusticidad, la precariedad, la acumulación, la imprecisión y la expresión. Con estos elementos, remite a la poética de las prácticas artísticas infantiles que fueron vistas por los surrealistas como posibilidades de libertad. La obra de Sassani propone el juego como elemento poético.”
La muestra, que ha sido declarada de Interés Cultural por el Ministerio de Cultura del Gobierno de Mendoza, se puede visitar hasta el 28 de agosto en Montevideo 230 Piso 8 Of. 4 de la ciudad de Mendoza