Natalia Marín nació en 1976 en la Ciudad de La Plata, Provincia de Buenos Aires. Se graduó como Licenciada en Comunicación Social. Su visión de las ciencias sociales la lleva a investigar sobre las culturas originarias, tomando como soporte la cerámica.
Su primera maestra en el oficio fue Gabriela Izuel y luego se perfeccionó en la técnica, estudiando en el Pasaje Dardo Rocha de la Ciudad de La Plata con su gran maestro Carlos Moreyra.
Viajó y visitó varios países de Europa y América en donde recorrió los principales museos y galerías del mundo. Luego se instaló unos años en España y París, lo que la llevó a conocer nuevos espacios culturales y terminó de darle una visión más completa del arte y un guiño contemporáneo a sus obras, definiendo entonces su estilo en Primitivista -Precolombino Contemporáneo.
Desde el año 2006 realiza exposiciones individuales y colectivas. Actualmente expone sus piezas en Galerías de Francia, Holanda y Argentina. Se desarrolla como docente en el centro de día Cántaros, de la ciudad de La Plata.
"Creo que mis esculturas son una combinación de contextos, historias, ritos, geografías, culturas, donde la técnica es tan importante como la obra en sí.
El mensaje con el que quiero hacer huella en cada una de mis obras es la defensa de la naturaleza y la utilización de los recursos naturales en su justa medida.
Ser artesano es hacer uso de los recursos naturales, utilizarlos en crear y transformar el material en una obra única e irrepetible.
Elegí trabajar con la cerámica porque creo que el barro es un material muy noble, que va hacia donde uno quiere que vaya. No nos condiciona y el límite es la imaginación" dice Natalia Marín.
Su primera maestra en el oficio fue Gabriela Izuel y luego se perfeccionó en la técnica, estudiando en el Pasaje Dardo Rocha de la Ciudad de La Plata con su gran maestro Carlos Moreyra.
Viajó y visitó varios países de Europa y América en donde recorrió los principales museos y galerías del mundo. Luego se instaló unos años en España y París, lo que la llevó a conocer nuevos espacios culturales y terminó de darle una visión más completa del arte y un guiño contemporáneo a sus obras, definiendo entonces su estilo en Primitivista -Precolombino Contemporáneo.
Desde el año 2006 realiza exposiciones individuales y colectivas. Actualmente expone sus piezas en Galerías de Francia, Holanda y Argentina. Se desarrolla como docente en el centro de día Cántaros, de la ciudad de La Plata.
"Creo que mis esculturas son una combinación de contextos, historias, ritos, geografías, culturas, donde la técnica es tan importante como la obra en sí.
El mensaje con el que quiero hacer huella en cada una de mis obras es la defensa de la naturaleza y la utilización de los recursos naturales en su justa medida.
Ser artesano es hacer uso de los recursos naturales, utilizarlos en crear y transformar el material en una obra única e irrepetible.
Elegí trabajar con la cerámica porque creo que el barro es un material muy noble, que va hacia donde uno quiere que vaya. No nos condiciona y el límite es la imaginación" dice Natalia Marín.
