A fines de los años
setenta, el artista argentino Luis Frangella
diseñó una línea de bolsos con formas
de animales que fueron el "boom" de la moda neoyorquina y los usaron
Elton John y la mujer del Sha de Irán, entre otros.
Sylvester Stallone y los Rolling Stones tienen obras suyas y la reina
Sofía de España inauguró su
última muestra, poco antes de la muerte del artista. El martes 30 de abril
a las 19 hs. se inaugura en el Centro Cultural Borges una
exposición de obras inéditas de este notable
creador casi ignorado en su país, pero reconocido
mundialmente.
La muestra, curada por Elena Oliveras, está integrada por 15 obras de gran tamaño (algunas de cinco por cuatro metros) que estaban en casa de los padres del artista y que se exhiben por primera vez. Se trata de de pinturas en óleo y acrílico, esculturas en cartón y dibujos, que permanecerán expuestas hasta el 19 de mayo.
La muestra, curada por Elena Oliveras, está integrada por 15 obras de gran tamaño (algunas de cinco por cuatro metros) que estaban en casa de los padres del artista y que se exhiben por primera vez. Se trata de de pinturas en óleo y acrílico, esculturas en cartón y dibujos, que permanecerán expuestas hasta el 19 de mayo.
Luis Frangella nació en Buenos Aires el 6 julio de 1944 y
murió en Nueva York el 7 de diciembre de 1990.
Realizó un master en Arquitectura en la UBA y
trabajó en colaboración con Clorindo esta. Obtuvo
la beca de la UBA para estudios de investigación visual en
urbanización, la beca del MIT (Massachusetts Institute of
Technology) y la Beca Guggenheim.
En 1976 se radicó en Nueva York, donde vivió hasta su muerte. Aunque en Buenos Aires realizó sólo unas pocas exposiciones individuales, su obras tuvo un importante recorrido internacional con muestras reiteradas en Nueva York y en Madrid, Barcelona, Estocolmo, San Francisco y Miami.
"La obra de Luis Frangella tiene la trascendente contundencia de lo clásico y la frescura del experimento –escribe Elena Oliveras-. Tal asociación lleva a plantear paradojas. En su doble condición de pintor y escultor eleva el objeto más banal, pobre, de descarte o menospreciado -un bibelot, una vela, una lata de gaseosa, una rata- al nivel de lo extraordinario. El concepto de lo extraordinario-banal, centralizado en sus trabajos, niega el estatuto de lo ‘contingente’ como algo minúsculo, circunstancial o casual".
En 1976 se radicó en Nueva York, donde vivió hasta su muerte. Aunque en Buenos Aires realizó sólo unas pocas exposiciones individuales, su obras tuvo un importante recorrido internacional con muestras reiteradas en Nueva York y en Madrid, Barcelona, Estocolmo, San Francisco y Miami.
"La obra de Luis Frangella tiene la trascendente contundencia de lo clásico y la frescura del experimento –escribe Elena Oliveras-. Tal asociación lleva a plantear paradojas. En su doble condición de pintor y escultor eleva el objeto más banal, pobre, de descarte o menospreciado -un bibelot, una vela, una lata de gaseosa, una rata- al nivel de lo extraordinario. El concepto de lo extraordinario-banal, centralizado en sus trabajos, niega el estatuto de lo ‘contingente’ como algo minúsculo, circunstancial o casual".
Dice también la curadora: "La presencia de rasgos
neoexpresionistas en su obra es compleja ya que ellas
también recupera investigaciones previas en el campo de la
percepción visual. Son las que encaró como
becario del M.I.T. durante los años 1973-1976. Fruto de esas
investigaciones fueron los trabajos lineales bidimensionales de los
años 70 que, al ser vistos con lentes
estereoscópicos, se convertían en
tridimensionales. De esta manera, un arco se transformaba en
túnel y un anillo circular en pozo profundo, lo que
ponía en evidencia la relación ojo-cerebro (...)
Entre otros méritos, Frangella es reconocido por sus
colaboraciones en piezas multi-media de John Cage y por su
intervención en la escena del East Village neoyorquino a
comienzos de los ’80, junto a David Wojnarowicz, Jean Michel
Basquiat, Keith Haring o Mike Bidlo. Quizás el hecho de
haber vivido en Nueva York durante la mayor parte de su vida hizo que
no tuviera entre nosotros el reconocimiento que alcanzó en
otras latitudes. De allí el interés de este
homenaje que el Centro Cultural Borges asume exhibiendo un conjunto de
trabajos inéditos".
La exposición se puede visitar en el Centro Cultural Borges, Viamonte esq. San Martín de lunes a sábados de 10 a 21 hs. y domingos y feriados de 12 a 21 hs.
La exposición se puede visitar en el Centro Cultural Borges, Viamonte esq. San Martín de lunes a sábados de 10 a 21 hs. y domingos y feriados de 12 a 21 hs.