El jueves 10 de diciembre se inaugura en el Centro Cultural Borges “Werner Bischof. Imágenes. El Sueño de la verdad”, espectacular exposición de la obra del famoso fotoperiodista suizo. Murió prematuramente a los 38 años pero con sólo diez años de carrera se convirtió en uno de los reporteros más importantes del mundo.
La exhibición está integrada por una cuidada selección de 106 imágenes de su amplio archivo fotográfico dirigido por su hijo Marco Bischof, quien también es curador de la muestra, con la colaboración de Virginia Fabri, directora del departamento de fotografía del Borges. Se trata de fotografías tomadas por Bischof en diversos países y que fueron publicadas en los principales medios de Europa y Estados Unidos, como Life, Paris Match, The Observer, Picture Post, e Illustrated, entre otros. Asimismo, se exhibirán imágenes inéditas de sus viajes por Latinoamérica.
La muestra, que se extenderá hasta fines de enero, está presentada por el Werner Bischof Estate y Magnum Photos con el auspicio de la Embajada Suiza, Hewlett Packard y Roche Argentina.
Werner Bischof nació en Suiza en 1916, estudió fotografía con Hans Finsler en la Escuela de Artes y Oficios de Zurich y luego abrió un estudio de fotografía y publicidad. En 1942 se transformó en reportero independiente para la revista Du y formó parte del grupo de artistas Allianz.
Bischof fue reconocido internacionalmente luego de la publicación en 1945 del reportaje sobre la devastación causada por la Segunda Guerra Mundial, que realizó en el sur de Alemania, Francia, Luxemburgo, Bélgica y Holanda.
En 1948 fotografió las Olimpíadas de Invierno, en Saint Moritz, para la revista Life.
Fue el primer fotógrafo en unirse a Magnum como miembro fundador en 1949.
En 1951 registró para la revista Life el hambre en la India y su reportaje sobre la situación en la ciudad de Bihar le trajo reconocimiento internacional.
Permaneció un año en Japón, y más tarde pasó a Corea, Hong Kong e Indochina, permaneciendo en este último territorio tres meses como corresponsal de guerra para París Match.
En el otoño de 1953 Bischof produjo una amplia serie de fotografías a color de los Estados Unidos.
Al año siguiente viajó a Méjico y a Panamá, y luego a una zona remota del Perú, donde se involucró en la realización de una película. Bischof murió trágicamente en un accidente automovilístico en los Andes peruanos, el 16 de Mayo de 1954
La exhibición está integrada por una cuidada selección de 106 imágenes de su amplio archivo fotográfico dirigido por su hijo Marco Bischof, quien también es curador de la muestra, con la colaboración de Virginia Fabri, directora del departamento de fotografía del Borges. Se trata de fotografías tomadas por Bischof en diversos países y que fueron publicadas en los principales medios de Europa y Estados Unidos, como Life, Paris Match, The Observer, Picture Post, e Illustrated, entre otros. Asimismo, se exhibirán imágenes inéditas de sus viajes por Latinoamérica.
La muestra, que se extenderá hasta fines de enero, está presentada por el Werner Bischof Estate y Magnum Photos con el auspicio de la Embajada Suiza, Hewlett Packard y Roche Argentina.
Werner Bischof nació en Suiza en 1916, estudió fotografía con Hans Finsler en la Escuela de Artes y Oficios de Zurich y luego abrió un estudio de fotografía y publicidad. En 1942 se transformó en reportero independiente para la revista Du y formó parte del grupo de artistas Allianz.
Bischof fue reconocido internacionalmente luego de la publicación en 1945 del reportaje sobre la devastación causada por la Segunda Guerra Mundial, que realizó en el sur de Alemania, Francia, Luxemburgo, Bélgica y Holanda.
En 1948 fotografió las Olimpíadas de Invierno, en Saint Moritz, para la revista Life.
Fue el primer fotógrafo en unirse a Magnum como miembro fundador en 1949.
En 1951 registró para la revista Life el hambre en la India y su reportaje sobre la situación en la ciudad de Bihar le trajo reconocimiento internacional.
Permaneció un año en Japón, y más tarde pasó a Corea, Hong Kong e Indochina, permaneciendo en este último territorio tres meses como corresponsal de guerra para París Match.
En el otoño de 1953 Bischof produjo una amplia serie de fotografías a color de los Estados Unidos.
Al año siguiente viajó a Méjico y a Panamá, y luego a una zona remota del Perú, donde se involucró en la realización de una película. Bischof murió trágicamente en un accidente automovilístico en los Andes peruanos, el 16 de Mayo de 1954