
En paralelo al diseño de edificios
emblemáticos porteños, como la sede central del ex Banco de Londres
(actual Hipotecario) o la Biblioteca Nacional, Testa forjó en etapas
diversas su obra artística. Su primera exposición individual data de
1952, cuando presentó en la galería Van Riel obras ligadas a la
figuración. Ya a mediados de los años 50, se inclinó por la abstracción
libre, y entre 1960 y 1965, fue parte del informalismo y trabajó solo
con blancos, negros y grises. En los años 70, recobró el color y una
figuración que permea los códigos de la arquitectura para abordar una
temática ecológica y humanista, donde la historia y la actualidad abren
un debate crítico con tintes irónicos. Así, a través de dibujos,
pinturas, esculturas e instalaciones, Testa crea desde la meditación del
arquitecto: la vida en la ciudad y los problemas urbanísticos, las
implicancias históricas de las pestes o los mitos de la historia
americana y argentina se cruzan con sus recuerdos y vivencias para dar
forma a un legado plástico tan importante como singular. Desde finales
de los años 80, su lenguaje, siempre expresionista, sintoniza con las
tendencias de la pintura posmoderna.
Clorindo Testa: “esta es mi casa”
se realiza con el apoyo de la Fundación Clorindo Testa, la Secretaría
de Cultura de la Nación y la Asociación Amigos de Museo Nacional de
Bellas Artes, y el patrocinio de las empresas Hafelle y Enas. Las obras
en exhibición provienen de la colección de la familia Testa, y de otros
acervos públicos y privados, como el Bellas Artes, Cancillería Argentina
y colección Balanz Contemporánea. y Daniela Mac Adden, y Fundación
Proa.