En el siglo XIX el trayecto romántico de los artistas a lugares desconocidos se hizo cada vez más habitual, en competencia con los indispensables viajes académicos a París, Roma o Munich. Pallière y Methfessel viajaron por América y compartieron una visión en la que mirar y conocer implicaban una forma de poder. Más aún cuando esas imágenes de lo lejano y exótico se propagaban en estampas y libros.
La exposición "Mirar, saber, dominar. Imágenes de viajeros en la Argentina", curada por Marta Penhos, que el Museo Nacional de Bellas Artes expondrá a partir del 23 de mayo, incluye un conjunto de imágenes de la Argentina como espacio geográfico transitado, durante más de un siglo, por viajeros, científicos y expedicionarios que experimentaron su vastedad, variedad y riqueza, asociado al ideario positivista que necesitaba verificar para poder dominar.
La inclusión en la exposición del cuadro célebre de Tomás Cabrera juntamente con sus dibujos preparatorios, hacen luz sobre una de las piezas clave de la representación de los hechos históricos de la región. La adscripción de la obra a una pintura misional y la referencia a las acuarelas de Florian Paucke, de increíble valor testimonial y artístico, completan esta exhibición.
La inclusión en la exposición del cuadro célebre de Tomás Cabrera juntamente con sus dibujos preparatorios, hacen luz sobre una de las piezas clave de la representación de los hechos históricos de la región. La adscripción de la obra a una pintura misional y la referencia a las acuarelas de Florian Paucke, de increíble valor testimonial y artístico, completan esta exhibición.