Se inauguró en la Galería Vasari la muestra "Cuadros de una exposición", una original y arriesgada apuesta de Alfredo Prior y Nahuel Vecino, dos reconocidos artistas pertenecientes a diferentes generaciones y estilos que realizaron, en conjunto, pinturas inspiradas en obras musicales de compositores tan disímiles como Händel, Mussorgzky, Santana o Stevie Wonder.Los artistas convocaron gran cantidad de celebridades del arte, entre los que estaban los artistas Josefina Robirosa, Marcos Zimmermann, Silvina Benguria, Juan José Cambre, Jacques y Florencia Bedel, Cristina Piceda, Nushi Muntaabski y Diego Gravinese; los coleccionistas Gabriel y Marina Werthein, Julio César Crivelli y Vicente Centurión, los curadores Gustavo Vásquez Ocampo y María Herrero, la diseñadora Silvia Miccio y el poeta Arturo Carrera.
La idea de la muestra es hacer "pintura de la música". Para ello, los artistas se inspiraron en el mundo de los sonido para volcarlos en lenguaje plástico. Desde "Vida Acuática", de Jorge Federico Händel, pasando por "Cuadros de una exposición", de Modesto Mussorgsky, hasta "Black magic woman", de Carlos Santana, y "Jesus Children of America", de Stevie Wonder. Clásicos de ayer y de hoy sublimados en la reinterpretación de dos pintores que intentan ser uno solo.
Ambos artistas realizaron una colección irreverente, disparatada, cargada de humor e imaginación, en la cual se ven desde palacios rusos en medio de la bruma, sirenas varadas en la orilla o peces tocando la trompeta. Todas las obras fueron realizadas en 2008.
Ambos artistas realizaron una colección irreverente, disparatada, cargada de humor e imaginación, en la cual se ven desde palacios rusos en medio de la bruma, sirenas varadas en la orilla o peces tocando la trompeta. Todas las obras fueron realizadas en 2008.