“Las telas que cose Stella (si se permite la aliteración) tienen costuras que no cierran muy bien. Algunas costuras son reales, otras pintadas. Pero la tela sufre una mutación, deja de ser tela para convertirse en piel. Y la pintora deja de ser pintora para convertirse en médico cirujano.
Las telas son pieles que sufren heridas, que sangran y duelen. Pero aparece la artista con una aguja y comienza a reparar aquellas lesiones. No hay una cura milagrosa, por el contrario se crea una situación de tensión, no de solución. Hay una herida abierta que está en pleno proceso de sanación que, por el momento, no es definitivo. En los trabajos de Stella hay nudos que sostienen la costura, nudos que no dejan que se abra la herida. Pero no son fuertes, en cualquier momento se pueden aflojar. Este parece ser uno de los ejes conceptuales más potentes de esta serie de obras. Todo es vulnerable. Todo es frágil. Pero se puede restaurar.” Julio Sánchez
Conversa con: Olga Molina
Anima: Silvia Weitzman
Coordina: Grabriela Levy Daniel
Responsable: Stella Maris Aguilera
Asesoras: Silvia Ons, Rosa Faccaro
Colaboradores: María García Blesa, Enrique Box, Guillermo Cabado, Daniella Flores, Francisca Giordano, Claudia Ester Levit, Gabriela Levy Daniel, Carmen Palmieri, Evangelina Samela, Gabriela Souto, Silvia Weitzman
