El punto de partida del proyecto es la escalera helicoidal negra que comunica el Paseo de las Artes de la Fundación con su terraza. Durante la primera visita del artista al espacio, la sala vidriada y de suelo espejado estaba totalmente vacía y la silueta arquitectónica negra parecía una escultura flotante.
Las escaleras son de un interés especial para Erlich, que ya ha trabajado con ellas en otras oportunidades, como en Window and Ladder (2008) y Staircase (2005), entre otras obras de su autoría. Lo que despierta su curiosidad por este elemento arquitectónico que permite el tránsito, el ascenso y el descenso y, en definitiva, la circulación entre un espacio y otro, es su carácter escultórico en el cual la idea de movimiento ya está implícita.
"Escalera horizontal" es una respuesta irónica a la idea de ascender o descender porque no sube ni baja. Su instalación motorizada tiene el poder de cambiar nuestra perspectiva de la realidad. La escalera horizontal, el artefacto arquitectónico alterado, genera en el que la mira una extrañeza capaz de despertarlo del piloto automático, devolverle la capacidad crítica y habilitar el espacio a la duda.
“La Escalera Horizontal simboliza valores que queremos promover en Santander: una organización horizontal, ágil y dinámica. Está en línea con la transformación cultural que queremos desarrollar en nuestra institución”, expresó Guillermo Tempesta Leeds, vicepresidente de Fundación Santander Argentina.
Durante 2020, Fundación Santander mantuvo su compromiso con acercar la cultura y el arte a las personas a través de la organización y difusión de actividades recreativas virtuales, gratuitas y para todo el país.
Inició su carrera con una muestra a los 18 años en el Centro Cultural Recoleta (Buenos Aires) y al poco tiempo participó del Core Program, una residencia de artista en Houston, Texas, USA (1998).
En 2000, participó en la Bienal del Whitney Museum y representó a Argentina en la 49th Venice Bienniale (2001) con Swimming Pool, una obra que hoy forma parte de las colecciones permanentes del 21st Century Museum of Art of Kanazawa (Japón) y del Voorlinden Museum (Países Bajos).
Sus obras públicas incluyen La Democracia del Símbolo, una intervención conjunta en el monumento del Obelisco y el MALBA que conmovió la ciudad de Buenos Aires en 2015; Maison Fond, obra permanente, que conmemoró la Conferencia Climática de la ONU en Paris (2015).
Ha recibido numerosos premios, entre ellos: el Roy Neuberger Exhibition Award (Nueva York, 2017), la nominación al Prix Marcel Duchamp (Paris, 2006), el UNESCO Award (Estambul, 2001), El Premio Leonardo (Museo Nacional de Bellas Artes, Buenos Aires, 2000), el Fondo Nacional de las Artes (Buenos Aires, 1992).
Leandro Erlich y Guillermo Tempesta |
La Fundación Santander Argentina abrió sus puertas en julio de 2019 para reafirmar el compromiso del banco Santander con la cultura, el arte y la educación del país.
Desde la intersección de las avenidas Juan de Garay y Paseo Colón, en el denominado Distrito de las Artes de la ciudad de Buenos Aires, el objetivo de la Fundación es contribuir al desarrollo y la difusión de la cultura, con especial foco en la promoción del arte contemporáneo. Acompañando al programa anual de exposiciones, se desarrollan visitas educativas, charlas, seminarios y talleres de formación artística.
Además, la Fundación Santander Argentina difunde y brinda apoyo al coleccionismo y a la producción artística a través de distintas iniciativas en conjunto con el Banco y/u otras instituciones culturales.